Rama es un nombre perteneciente a una deidad hindú, el cual es asignado al inicio de la obra a un objeto que procede de más allá del sistema solar. Dado que tiene forma perfectamente cilíndrica y sigue una trayectoria casi directa hacia el Sol a gran velocidad, se decide mandar una expedición tripulada que pronto identifica a Rama como algo artificial. Una vez dentro, encuentran que la mayor parte del mismo está vacío, y que en las paredes interiores del cilindro existen edificios y hasta un pequeño mar, sometidos a gravedad simulada, provocada por la rotación de Rama sobre su propio eje. Su entrada en la nave coincide con una aparente reactivación de la misma, y los exploradores no dejan de observar las constantes evidencias de los que fueran sus constructores. La finalidad de Rama no es revelada, aunque existen varias secuelas de la novela en las que se profundiza en este tema.
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